El impacto de los aranceles impuestos por la administración Trump ha sido un tema de gran debate económico desde su implementación. De acuerdo con Marcelo Ebrard, exsecretario de Relaciones Exteriores de México, estos aranceles han tenido un efecto más significativo sobre los consumidores de Estados Unidos que sobre México.
Impacto en consumidores y comercio
Ebrard destacó que, en lugar de afectar principalmente a México, los consumidores estadounidenses son quienes han enfrentado las mayores consecuencias económicas debido a estas tarifas. Según sus declaraciones, el aumento de precios como resultado de los aranceles ha recaído directamente sobre los bolsillos de los ciudadanos en EE.UU.
Ebrard comentó: “Los aranceles impuestos no han logrado los objetivos económicos que se buscaban, y el consumidor estadounidense es quien más resiente el incremento de costos”.
El análisis indica que los aranceles han provocado que varias cadenas de suministro reevalúen sus estrategias, y en muchos casos, los productos terminados han tenido un incremento considerable en sus precios finales. Esto ha resultado en una disminución del poder adquisitivo de los consumidores estadounidenses.
Algunos de los puntos más destacados sobre los efectos de los aranceles incluyen:
- Incremento del costo de productos de consumo diario.
- Reducción del comercio bilateral entre México y EE.UU.
- Reubicación de cadenas de suministro buscando evitar tarifas.
A pesar de esto, el impacto en las exportaciones mexicanas no fue tan severo como se esperaba inicialmente. México ha logrado diversificar sus mercados y ha incrementado sus relaciones comerciales con otros países, mitigando parcialmente los efectos adversos esperados de estos aranceles.
Ebrard también mencionó que, aunque las políticas arancelarias pueden ser revisadas en el futuro, es vital para México mantener una estrategia de diversificación económica para reducir la dependencia de cualquier circunstancia que pueda afectar el comercio con su principal socio, Estados Unidos.