La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) ha recomendado a los países de América Latina que consideren un aumento en los impuestos al tabaco. Según un informe reciente de la OCDE, esta medida no solo podría generar ingresos fiscales adicionales, sino que también podría reducir el consumo de tabaco y, por lo tanto, mejorar la salud pública.

Recomendaciones de la OCDE

El estudio de la OCDE sugiere que los impuestos al tabaco en la región aún son relativamente bajos en comparación con el promedio internacional. Este organismo internacional sostiene que incrementar estos impuestos puede ser una herramienta eficaz para desincentivar el consumo de tabaco, especialmente entre los jóvenes y los segmentos de población con menores ingresos.

Un aumento en los impuestos podría tener múltiples beneficios, no solo en términos de salud sino también financieros. Según la OCDE, los países podrían utilizar los ingresos adicionales para financiar servicios de salud u otras necesidades sociales críticas. En este sentido, el informe señala:

«Incrementar los impuestos al tabaco es una medida que puede contribuir a mejorar la salud pública, mientras se fortalecen las finanzas gubernamentales».

Algunas cifras destacadas del informe son las siguientes:

• Los impuestos sobre el tabaco representan menos del 0.5% del PIB en la mayoría de los países latinoamericanos.
• Un aumento del 10% en el precio del tabaco puede reducir el consumo entre un 4% y un 8%.
• Los costos de salud relacionados con el consumo de tabaco ascienden a miles de millones de dólares al año en la región.

Finalmente, la OCDE destaca que aunque el aumento de los impuestos es una política efectiva, debe ir acompañada de otras medidas complementarias como campañas de sensibilización y restricciones a la publicidad del tabaco. Con estas acciones, los países de América Latina podrían avanzar hacia una mejora significativa en la salud de sus poblaciones y en la sostenibilidad de sus políticas fiscales.